JUAN ANGEL FERRER Pide otra vez la demisión del concejal de cementerios SIGUEN ACUMULANDOSE ATAUDES EN CONTENEDORES

RUEDA DE PRENSA

  

Maesba

 Me consta que es como predicar el en desierto. En alcalde en funciones, Agustín Navarro, al mismo tiempo concejal del área de Cementerios es un claro exponente vivo de la negación en la labor pública. Hace unos meses este medio informativo, fue en primero, dejo claro el abandono de que era objeto uno de nuestros Campo Santos, el de San Jaime. Dijo, como siempre hace, que se quemarían en el crematorio de la “Perrera” pero allí, como dije hace un par de días, no se pueden quemar ya que en honor no estan hecho a la medida de los ataúdes. Dijo, como siempre dice, que mandaría a comprar un horno crematorio para este menester, tampoco lo ha hecho.

Hoy en edil no adscrito, una rueda de prensa, se expresa largamente, argumentando sus palabras, con una serie de informalidades de esta “autoridad” local que denota su total incapacidad para responsabilizarse de una de las aéreas municipales, como es la de Cementerios. Si aquí esta fallando mas que una escopeta de feria, ya nos podemos figurar lo que está sucediendo a nivel global de su cargo.

Por ultimo cabe destacar la puesta el marcha de medidas sanitarias para los trabajadores que tienen que dedicarse a este menester de vaciar los ataudes

y es obligatoriamente usar guantes especiales, ropa y mascarilla. Cosa que el alcalde no hace cumplir.

EN RUEDA DE PRENSA 

AGUSTÍN NAVARRO DEBE DIMITIR COMO CONCEJAL DE CEMENTERIOS

Hace ya casi tres meses que los medios de comunicación se hicieron eco del lamentable espectáculo que ofrecían varios ataúdes tirados en unos contenedores. Estos ataúdes ardían tradicionalmente en un quemador aledaño. Sin embargo, desde el incendio que asoló la huerta el pasado mes de febrero, se han dejado de incinerar en este quemador. Ya no se queman en este quemador, a pesar de que Gema Amor advertía que reunía todas las autorizaciones y requisitos, intentando justificar que el origen del incendio no se encontraba en este quemador municipal.

De forma inmediata, Agustín Navarro entonó el mea culpa y pronto declaró que se había actuado rápido para solucionarlo. Como es habitual, lanzó una promesa, la promesa de que en el plazo de un mes y medio a dos meses, se dispondría de una incineradora para quemar los ataúdes y otros restos funerarios. Según las noticias de principios de abril, Agustín Navarro decía que el coste de 35.000 euros de esta incineradora surgiría de una retención de crédito que la Concejala de Hacienda ya estaba estudiando y que el Concejal de Contratación ya gestionaba el procedimiento más rápido para licitar y comprar la incineradora. Hasta tener la nueva incineradora, se utilizaría la que disponen en el albergue de animales, decía Agustín Navarro. Mucho humo.

En estos tres meses, la gestión de los cementerios se ha visto empañada nuevamente por la torpe acción del Agustín Navarro. Un enterrador municipal ha sufrido un accidente grave cuando estaba dando sepultura a un vecino fallecido. Como las tareas del enterramiento las desempeña solo un funcionario, éste cayó desde una plataforma elevada y tuvo que ser atendido por los propios familiares del finado, porque no había ningún otro funcionario que le ayudara en estas tareas tan delicadas. Hay que pensar en lo esperpéntico de la situación. La soledad de este funcionario accidentado en un entierro contrasta con el jolgorio y el tumulto que forman los muchos asesores de Gema Amor y Agustín Navarro en cualquier fiesta, en cualquier sarao o en esas nuevas visitas a los barrios.

Ahora, además, se está investigando si se cumplían todas las normas de prevención de riesgos laborales y si la plataforma disponía de los elementos de seguridad necesarios. Siendo una gestión de Agustín Navarro, ya sospecho cual puede ser el resultado de esta investigación.

Y después de tres meses, más de cuarenta ataúdes, la mayoría desmontados, se encuentran todavía en varios contenedores y locales esperando la incineradora prometida. Tapados con lonas negras, para evitar que los ciudadanos los puedan reconocer, un poco mas adecentados, pero esperando a que las promesas de Agustín Navarro se hagan realidad. Hay que tener fe.

El panorama actual, sigue siendo lamentable y desolador: no está la nueva incineradora, después de un año todavía no se ha licitado la necesaria ampliación de nichos, solo hay un único funcionario para los enterramientos, los ataúdes persisten en su espera para ser quemados, tampoco pueden quemarse en la incineradora del albergue de animales porque no caben, no se sabe nada ni del presupuesto ni de la licitación de la incineradora, el pobre funcionario sufre de la recuperación de sus fracturas y Agustín Navarro sigue falsamente prometiendo, sigue sistemáticamente engañando y sigue habitualmente embaucando. Ni en estos asuntos del cementerio, que merecen todo el respeto, todo el decoro y toda la dignidad, Agustín Navarro es capaz de decir la verdad.

Como recordarán, no tuve otro remedio que pedirle entonces a Agustín Navarro que delegara las competencias de Cementerios en otro concejal, dada su triste y nefasta gestión. Ahora, después de tres meses, tengo que solicitar nuevamente que deje esta delegación de cementerios, por el bien de los ciudadanos y por el respeto a los que en el camposanto encuentran su descanso final.

Agustín Navarro, debe dejar en manos de otro concejal la delegación de los cementerios, en manos de otro concejal que sepa trabajar y no nos engañe una vez más, como este concejal de Cementerios hace cada día. Permítanme que acabe con un dicho popular, con una frase que bien resume esta situación: que con Agustín Navarro, en el cementerio, que Dios nos pille confesados.

P.D. Agustín Navarro es el Alcalde de Benidorm.

JUAN ANGEL FERRER AZCONA

CONCEJAL NO ADSCRITO